Una jornada marcada por la participación activa de padres, madres y apoderados vivió este viernes el Liceo Nacional de Llolleo, en el marco de la conmemoración del Día de la Familia. La comunidad educativa se reunió en torno a diversas actividades que buscaron fortalecer los vínculos entre estudiantes, familias y el establecimiento.
El evento fue diseñado en tres etapas. La mañana comenzó con círculos de palabra al interior de las salas, donde los estudiantes, acompañados por sus familias, reflexionaron sobre lo vivido durante el primer semestre: lo que más les gustó, los desafíos enfrentados y las expectativas para la segunda mitad del año. Este espacio íntimo fue acompañado de un desayuno saludable, generando un ambiente de cercanía y confianza.
Posteriormente, la comunidad se trasladó al gimnasio del liceo para participar en actividades recreativas. Juegos, dinámicas y ejercicios compartidos buscaron promover la cooperación y el disfrute entre generaciones.
El cierre de la jornada estuvo marcado por una muestra de los talleres extraprogramáticos del establecimiento. En el auditorio y terrazas del liceo se desplegaron exhibiciones del taller de karate —que fue especialmente destacado por haber obtenido el segundo lugar en el torneo provincial “Kangeiko de invierno”— así como del taller de yoga, que realizó una clase conjunta entre niños y sus padres. También se presentaron muestras del taller de arte, ensamble musical, orquesta y folclore, con presentaciones de bailes típicos del norte, centro y sur del país.
En esta instancia también se premiaron a los estudiantes que destacaron en el concurso de las aves, realizado el semestre anterior. Recibieron distinciones Mía Silva de 3° básico A, Raúl Hernández de 6° básico A y Ayleen Céspedes de 4° básico B, quienes estuvieron acompañados por sus familias.
El rector del liceo, Juan Carlos Orellana, destacó el valor formativo de la jornada que es parte del proceso de transformación educativa del liceo: “La importancia de celebrar el Día de la Familia es incorporar a nuestros padres apoderadas y apoderados al centro educativo, para que puedan vivenciar el trabajo que hacen sus hijos en su aprendizaje diario”. Asimismo, valoró que este tipo de encuentros evidencien que “el trabajo formativo de nuestros estudiantes no lo hace solo el liceo, sino que también lo realizan junto a sus familias”.
Desde la organización, la psicóloga y encargada de Convivencia Escolar, Issa Bella Harding, explicó que el objetivo fue “generar espacios de comunidad, de vinculación con todos los integrantes de la comunidad educativa”. En la misma línea, la profesora y coordinadora del ciclo básico, Carla Díaz, destacó el entusiasmo del alumnado: “Cada profesor está orgullosísimo de sus estudiantes y de los logros que han tenido”.
La jornada fue organizada por el equipo directivo junto a los profesores tutores y se enmarca en los esfuerzos del liceo por fortalecer la convivencia escolar y la participación de toda la comunidad en el proceso educativo.
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